30 marzo 2016

La hipermetropía sin diagnosticar está relacionada a bajos niveles de lectura en niños pequeños

De acuerdo a un estudio reciente, los niños con hipermetropía sin diagnosticar tienen significativamente menores niveles de lectura que sus pares.

Investigadores de Estados Unidos observaron el desempeño en niños de 4 a 5 años de edad en una prueba estandar de lectura temprana y compararon esos resultados con los de los exámenes oculares.

Encontraron que los niños cuyos exámenes oculares indicaban una hipermetropía sin tratar tuvieron un peor desempeño en el examen que sus pares con visión normal.

De los 492 niños que participaron en el estudio, aquellos con hipermetropía tuvieron dificultades con la sección impresa de la prueba de conocimiento, que examinaba la habilidad de los niños para identificar letras y palabras.

Cuando se diagnostica en niños pequeños, una hipermetropía de moderada a alta puede ser fácilmente corregida con lentes. Pero los investigadores estimaron que más del 14% de los niños en edad preescolar padecen hipermetropía moderada o alta sin diagnóstico y sin tratamiento.

La Dra. Marjean Taylor Kulp, que dirigió la investigación, cree que los problemas de visión no diagnosticados en niños pequeños pueden afectar el aprendizaje posteriormente.

Dijo: “Estudios anteriores han relacionado la hipermetropía no corregida y la habilidad lectora en niños de edad escolar.”

Agregó que se sabe menos acerca de los efectos de la hipermetropía en niños de 4 a 5 años, por eso la necesidad del este estudio.

La profesora Elise Ciner, investigadora de la Salus University del Reino Unido, dijo a Optometry Today: “Los exámenes de la vista podrían ayudar a identificar a los niños que pueden tener problemas de visión que impacten en el aprendizaje temprano y la adquisición de habilidades de lectura, así como causar problemas de visión secundarios. Una hipermetropía de moderada a alta puede poner a estos niños en riesgo de ambliopía o estrabismo.”

La investigación fué publicada en la revista Ophthalmology.

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23 marzo 2016

El virus Zika daña el desarrollo ocular de los niños aún no nacidos

Se ha reportado atrofia macular en niños nacidos en Brasil con severos defectos de nacimiento después de ser expuestos al virus Zika en el útero.

Dos niñas y un niño con microcefalia han sido sometidos a revisión ocular por investigadores de la Universidad Federal de Brasil en Sao Paulo y el HOPE Eye Hospital.

Se descubrió, en los exámenes oculares, incluyendo la biomicroscopía y el examen del fondo de ojo, que los tres infantes tenían un fuerte pigmento macular . Estos hallazgos fueron publicados en The Lancet del último mes.

También se encontró que los niños no tenían reflejo foveolar -que es crítico para la visión central- y alteraciones en el fondo del ojo en la región macular. Un niño también tenía atrofia neuroretinal macular bien definida.

Los autores del artículo Camila Ventura, Mauricio Maia, Vasco Bravo, Adriana Gois y Rubens Belfort dijeron: “Hasta donde sabemos, este es el primer reporte de hallazgos oculares en infantes con microcefalea nacidos después de la aparición del virus Zika.”

Esta semana la Organización Mundial de la Salud declaró la aparición de una emergencia de salud pública. El virus que es primeramente esparcido por un mosquito tropical, ahora está en 25 países de Centro y Sud América.

Los síntomas de la enfermedad incluyen conjuntivitis, fiebre, erupciones cutáneas y dolor en las articulaciones. Sin embargo, ha sido relacionado con defectos de nacimiento en hijos de mujeres embarazadas que contrajeron la enfermedad en alguna etapa de su embarazo.

No hay un tratamiento específico o vacuna para la enfermedad. Además de la pérdida de visión y retraso intelectual, los niños expuestos al virus Zika también sufren de pérdida auditiva y convulsiones.

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16 marzo 2016

Las bacterias ‘ven’ como nosotros

Las bacertias son capaces de sentir y moverse hacia la luz actuando como ojos microscópicos, de acuerdo a científicos.

Desde hace mucho tiempo se sabe que una pequeña bacteria es capaz de detectar y responder a la luz a fín de sobrevivir, pero investigadores en Londres aseguran que ahora hay evidencia de que los microbios enfocan la luz de una manera más parecida a como lo hace el ojo humano.

Al estudiar el organismo unicelular del estanque de lodo Synechocystis, investigadores fueron capaces de atraer al microorganismo hacia la fuente de un rayo de laser que brillaba en la superficie de un plato de bacterias.

El equipo observó que los rayos luminosos que entraban fueron refractados por una superficie bacterial esférica y enfocados en un punto en la parte de atrás de la célula. La bacteria entonces se movió en la dirección opuesta a este punto, quedando más cerca de la luz, que aprovechan para realizar la fotosínesis y obtener energía para poder crecer.

Los investigadores de la Queen Mary University de Londres dicen que este sistema de detección es sorprendentemente similar a la manera en que la luz es enfocada por la córnea del ojo hacia la retina.

Probablemente estos resultados determinen un punto clave de convergencia en la evolución entre una bacteria simple y organismos multicelulares más complejos como los humanos y los animales que tienen ojos tipo cámara.

El profesor Conrad Mullineaux, que dirige la investigación, dijo que el descubrimiento es un emocionante ejemplo de la historia evolutiva de la compleja detección de la luz.

Comentó: “Nuestra observación de que la bacteria es un objeto óptico es bastante obvio en retrospectiva, pero hasta ahora podemos verlo.

“Nadie lo notó antes, a pesar de que los científicos han estado observando las bacterias bajo el microscopio por los últimos 340 años.”

Los investigadores estiman que la Synechocystis, que vive en el agua y las piedras, puede detectar la luz con una resolución angular de 21 grados, comparado con un impresionante 0.02 grados en los humanos.

Esto sugiere que las bacterias, que son alrededor de medio billón de veces más pequeñas que un ojo humano, solo pueden percibir un contorno borroso de cualquier fuente de luz que les llega.

Los investigadores ahora están interesados en estudiar la habilidad de las bacterias no esféricas, en forma de bastón, para responder a la luz con la esperanza de entender más acerca de cómo evolucionaron nuestros ojos.

La investigación fué pulicada en la revista eLIFE.

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09 marzo 2016

Yoga y Glaucoma

Los pacientes diagnosicados con glaucoma pueden estar sujetos a un aumento de la presión intraocular mientras practican yoga, particularmente durante posiciones en las cuales la cabeza está hacia abajo, de acuerdo a los investigadores del New York Eye and Ear Infirmary.

Los pacientes son alentados para permanecer activos; sin embargo, los pacientes con glaucoma deberían evitar los ejercicios que puedan incrementar la presión intraocular como el levantamiento de pesas, dijo Robert Ritch, autor principal del estudio.

“Este nuevo estudio ayudará a los clínicos a advertir a sus pacientes del riesgo potencial asociado con varias posiciones de yoga y otros ejercicios que incluyen poses invertidas,” dijo el Dr. Ritch.

El estudio comparó la presión intraocular de 10 pacientes sanos con 10 pacientes con glaucoma mientras realizaban varias posiciones de yoga con la cabeza hacia abajo. Los investigadores midieron la presión intraocular basal, luego tomaron medidas posteriores manteniendo a los grupos en las posiciones brevemente, por 120 segundos y mientras permanecían sentados por 10 minutos.

Las medidas de los grupos participantes revelaron un aumento en la presión intraocular en todas las posiciones de yoga probadas, y la del perro mirando hacia abajo mostró el mayor incremento. El incremento fué de 17 mmHg a 28 mmHg en pacientes con glaucoma y de 17 mmHg a 29 mmHg en pacientes normales, de acuerdo al estudio. Todas las posiciones de yoga estuvieron asociadas con un incremento significativo en la presión intraocular a los 60 segundos de tomar la posición y volvieron a sus niveles normales a los dos minutos de regresar a la posición de sentados.

Debido a que la presión intraocular elevada es un importante factor de riesgo para un posterior daño al nervio óptico, “el aumento de la presión intraocular después de hacer posiciones de yoga debe tomarse en cuenta por los pacientes con glaucoma y los especialistas que los tratan,” dijo la primera autora del estudio Jessica Jasien.

Ella sugiere que los pacientes con glaucoma comenten su diagnóstico con sus instructores de yoga para que les permitan la adecuada modificación de sus rutinas de práctica.

Aunque el estudio sugiere que ciertos aspectos del yoga son causa de preocupación, algunos optometristas dudan de su impacto clínico. “Ciertas actividades incrementan las presión intraocular mientras son realizadas,” dice James Fanelli, del Cape Fear Eye Institute en Wilmington, “pero las actividades limitadas en duración probablemente no significan un riesgo significativo a largo plazo; sin embargo, esto podría ayudar en casos en los que un paciente está constantemente empeorando a pesar del tratamiento.”

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02 marzo 2016

Una opción para las infecciones oculares de hace 1000 años

Mezclar ajo, cebolla y vino puede sonar como la base de una buena cocina francesa, pero también es la base de un remedio antimicrobial anglosajón perdido hace mucho tiempo que puede ser efectivo contra las modernas bacterias resistentes a los antibióticos.

La Dra. Christina Lee, profesor asociado de Estudios Vikingos en la Universidad de Nottingham tradujo una receta de mil años de antigüedad para tratar infecciones de los ojos, tomada de un viejo texto anglosajón guardado en la Biblioteca Británica.

La Dra. Lee trabajó en la traducción de la receta en un esfuerzo colaborativo con microbiólogos en la universidad.

El texto en inglés antiguo subraya detalles para la preparación y uso de un bálsamo para tratar las infecciones oculares, que la medicina moderna ha mostrado que pueden ser causadas por bacterias. Por ejemplo, el staphylococcus aureus puede causar conjuntivitis y orzuelos.

El texto medieval instruye al boticario — que prepararía y vendería las medicinas — a mezclar cebolla, ajo, vino y bilis de vaca, entre otros ingredientes, en una cazuela de cobre, y dejarlo reposar por nueve días.

El equipo en Nottingham trató de apegarse fielmente al texto, y replicar cualquier ingrediente ambiguo lo mejor que pudieron.

La Dra. Freya Harrison, de la escuela de Ciencias de la Vida de la universidad, probó la mezcla en las bacterias, incluyendo cepas de s. aureus resistente al antibiótico meticilina (MRSA).

Las bacterias fueron cultivadas en biofilms, que pueden volver a los microbios increíblemente resistentes a los medicamentos, y el bálsamo medieval fué aplicado como una medicina tópica.

La mezcla rompió la capa de bacterias matando a muchas de las células. Colaboradores en Estados Unidos mostraron que más del 90% de MRSA fueron eliminadas con la mezcla en biopsias de heridas en ratones infectados.

“Encontramos que (la mezcla) es increíblemente potente como un antibiótico en este contexto” dijo la Dra. Harrison.

“Los textos medievales contienen muchos remedios diseñados para tratar lo que son claramente infecciones por bacterias... estos remedios fueron desarrollados bien antes del entendimiento moderno de la teoría de los gérmenes” dijo la Dra. Lee.

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