30 julio 2014

El tamaño de los vasos sanguíneos de la retina relacionado con el coeficiente intelectual

Un estudio reveló que el tamaño de los vasos sanguíneos en el fondo del ojo pueden dar indicios sobre la salud del cerebro de las personas de 30 años, antes de que se presenten las enfermedades neurológicas relacionadas con la edad.

El grupo de estudio dirigido por Idan Shalev de la Universidad Duke en Carolina del Norte estudió la relación entre el grosor de los vasos de la retina y la puntuación de los exámenes de inteligencia en alrededor de 1000 neozelandeses nacidos entre 1972 y 1973 y le dió seguimiento por 38 años con evaluaciones repetidas.

Se usó una cámara digital para fondo de ojo para evaluar el tamaño de los vasos sanguíneos de la retina. El examen de inteligencia fue aplicado en la niñez a la edad de 7, 9, 11 y 13 años, y después en la adultez a la edad de 38 años.

El Sr. Shalev y co-investigadores encontraron que los participantes con vénulas más anchas tuvieron una puntuación más pobre en los exámenes de inteligencia a la edad de 38 años, que aquellos con vénulas más delgadas. También encontraron que las vénulas más anchas en el ojo estuvieron relacionadas con un coeficiente intelectual más bajo en la niñez.

“Nuestros resultados iniciales indican que las imágenes de la retina pueden ser una herramienta de investigación útil para que la ciencia psicológica pueda estudiar la relación entre la inteligencia y la salud a lo largo de la vida”, dijo el Sr. Shalev.

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Foto de Bjorn Hovdal

23 julio 2014

La expresión facial y la visión

Los científicos pueden haber descubierto la razón evolutiva detrás de porqué abrimos tanto los ojos cuando tenemos miedo y los entrecerramos cuando estamos enojados.

Nuevas investigaciones sugieren que tales expresiones faciales pueden haber evolucionado a partir de una reacción a los estímulos del medio ambiente para incrementar la sensibilidad y la agudeza visual.

En el caso del miedo, abrir mucho los ojos aumenta el campo de visión, brindando al cerebro más información visual para resolver de dónde viene la potencial amenaza.

Mientras que en el disgusto, los ojos se cierran levemente para bloquear el “ruido” visual y poder identificar la causa nociva del disgusto. Las reacciones son “compensaciones ópticas”, dicen los investigadores, que permiten mejorar la sensibilidad y agudeza visual.

El grupo usó medidas optométricas estándar para probar el modelo y confirmar los efectos.

El profesor Adam Anderson de la Universidad Cornell, que dirigió la investigación dijo: “las razones para esto es permitir a los ojos aprovechar las propiedades de la luz que son más útiles en estas situaciones.” La investigación es publicada en la Revista Psychological Science.

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16 julio 2014

Ortóptica

La palabra ortóptica viene del griego orto que significa derecho, y óptica que estuida los fenómenos luminosos y de la visión, y los ortópticos son profesionales de la salud que se especializan en el estudio de la motilidad ocular y el desarrollo visual.

Junto con el oftalmólogo, el ortóptico examina y ayuda en el diagnóstico de las disfunciones del sistema visual que incluye la visión, el movimiento ocular, la alineación de los ojos y la binocularidad.

El ortóptico se enfoca en el tratamiento no quirúrgico de desórdenes visuales como la ambliopía y el estrabismo. Evalúa y diagnostica estos desórdenes y establece planes de tratamiento.

La amblopía es falta de desarrollo visual, o pérdida de habilidad visual debido a la falta de uso del ojo. A fín de que los ojos se desarrollen igual, cada músculo ocular debe ser capaz de formar una imagen clara del objeto observado. Si uno de los ojos se mueve fuera de su eje (estrabismo), un ojo tiene un error de refracción más grande que el otro (anisometropía), o hay una enfermedad de un ojo, entonces ambos ojos no están viendo el mismo objeto o no están recibiendo imágenes iguales. Esta discrepancia impide la visión binocular, y el cerebro apaga el ojo dañado (supresión). Esto detiene el desarrollo visual en ese ojo y la visión se estanca, y en muchos casos, se deteriora.

El trabajo del ortóptico es ayudar en el examen de condiciones que pueden llevar a ambiopía, y determinar si la ambliopía existe. Como muchos de sus pacientes aún no hablan, el ortóptico debe entender el desarrollo del sistema visual para lograr un buen juicio.

Para valorar adecuadamente las capacidades visuales se usan una variedad de exámenes diseñados para trabajar dentro del breve tiempo de atención de los niños.

La ambliopía que es sensible al tratamiento (es decir que no es causada por una enfermedad) puede requerir tratamiento con lentes, oclusión, o terapia de penalización (gotas). Armado con la información completa acerca del sistema visual de los niños, incluyendo un examen del fondo del ojo y los lentes correctos, el ortópico es la primer persona en monitorear y reforzar el plan de tratamiento, y ofrecer apoyo y guía a los padres.

El rol del ortóptico es bastante diferente en el diagnóstico y manejo de la visión doble. Con frecuencia es llamado para valorar la función visual de pacientes adultos en quienes se ha alterado la visión binocular. La diplopia (visión doble) puede manifestarse por una variedad de causas como enfermedad ocular, enfermedad sistémica, enfermedad vascular, golpes o errores de refracción. El exámen ortóptico determina cómo ha sido afectado el sistema visual, lo que con frecuencia lleva a diagnosticar una enfermedad subyacente. El ortópico entonces busca lograr la comodidad visual del paciente. La doble visión con frecuencia puede ser tratada con terapia de prismas, que se basa en el conocimiento de los principios visuales y habilidad para integrarlos en la terapia.

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Foto de TCOS





09 julio 2014

Manejando seguro después de los 60

Si usted tiene 60 años o más, manejar un carro puede ser difícil. Los cambios visuales relacionados con la edad y las enfermedades oculares pueden comprometer la habilidad para manejar, incluso antes de que la persona tenga síntomas. Puede ser que haya notado cierta dificultad al calcular las distancias y la velocidad. La billantez de la luz del sol o de los carros que se acercan en la noche pueden impedir la buena visión.

Algunos cambios en la visión relacionados con la edad que comúnmente afectan a las personas mayores que manejan son:

  • No ser capaz de ver los señalamientos de las calles tan claramente
  • Tener dificultad para ver objetos más cercanos como el tablero del carro o los mapas de carreteras
  • Cambios en la percepción de los colores
  • Problemas para ver con poca luz o en la noche
  • Dificultad para adaptarse al deslumbramiento por las luces de los carros
  • Sentir pérdida de la visión periférica

Las siguientes recomendaciones pueden ayudar a mantenerse seguro cuando maneja, especialmente de noche

  • Extreme las precauciones en los cruces de las calles. Muchos choques que involucran gente mayor ocurren en los cruces de las calles ya que fallan al ceder el paso, especialmente cuando dan vuelta a la izquierda. Ver cuidadosamente en ambas direcciones antes de entrar a una intersección y voltear la cabeza con frecuencia cuando maneja para compensar cualquier disminución de la visión periférica.
  • Reducir la velocidad y limitarse a manejar de día. Si está teniendo problemas para ver de noche o tiene dificultad para recobrarse del deslumbramiento, maneje más despacio y evite manejar de noche o por calles desconocidas, siempre que sea posible.
  • Evite usar lentes con armazón muy grueso. Los lentes con varillas muy anchas pueden restringir su visión periférica
  • Tome un curso de manejo para gente mayor. Participe en un programa de manejo para gente mayor, que pueda ayudarle a aprender más acerca de los cambios físicos que pueden afectar su habilidad para manejar y cómo compensarlos.
  • Hágase un examen de la vista cada año. Los exámenes anuales pueden asegurarle que la graduación de sus lentes está actualizada y le brinda detección temprana de cualquier problema de salud ocular que se presente.

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02 julio 2014

¿Cuáles son los riesgos de la cirugía refractiva?

La mayoría de las personas están conformes con los resultados de su cirugía refractiva. Sin embargo, como cualquier otro procedimiento médico, tiene riesgos. Por eso es importante entender las limitaciones y posibles complicaciones de la cirugia refractiva.

Antes de someterse a un procedimiento refractivo, se deberían analizar cuidadosamente los riesgos y beneficios basándose en el particular sistema de valores, tratando de evitar el ser influenciados por amigos que ya se hayan operado o doctores que alienten a operarse.

Como resultado del tratamiento, algunos pacientes pierden renglones de visión en la cartilla de Snellen, que no pueden ser recuperados con lentes.

Algunos pacientes desarrollan síntomas de debilitamiento visual. Hay quienes padecen deslumbramiento, halos o doble visión que puede afectar seriamente su visión sobre todo de noche.

Incluso con buena visión en la cartilla, algunos pacientes no ven tan bien en situaciones de bajo contraste, como en la noche o con neblina, después del tratamiento.

Solo un cierto porcentaje de pacientes alcanzan una visión de 20/20 sin lentes, debido a que la cirugía los corrigió de más o de menos. Puede ser que se requiera de un tratamiento adicional, pero no siempre es posible.

Las personas podrían aún necesitar lentes después de la cirugía refractiva. Esto podría ser cierto incluso cuando la graduación antes de la cirugía fuera muy pequeña.

Los lentes de cerca suelen usarse antes y también después de la cirugía refractiva.

Como resultado de la cirugía, puede disminuir la producción de lágrimas para mantener los ojos húmedos y cómodos. Los ojos secos no solo causan incomodidad, sino que pueden reducir la calidad visual debido a la borrosidad intermitente y otros síntomas visuales. Esta condición puede ser permanente. Podría necesitarse una terapia intensiva de gotas.

Los resultados generalmente no son tan buenos en pacientes con graduaciones grandes de cualquier tipo. Se sugiere discutir las expectativas con el médico y tomar en cuenta que se podrían necesitan lentes después de la cirugía.

Para algunos pacientes hipermétropes, los resultados pueden disminuir con la edad.

No hay datos disponibles que se refieran a los resultados a largo plazo dado que el LASIK es una tecnología relativamente nueva. El primer laser para cirugía fué aprobado en 1998. Por lo tanto, la seguridad y efectividad a largo plazo de la cirugía se desconoce.

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